viernes, 21 de enero de 2011

Alida y Adonis. Leyenda


Hace muchos años, en la antigua Grecia, había un joven, llamado Adonis que estaba muy enamorado de una chica, llamada Alida, que era la más guapa de su pueblo, pero al ser tan guapa, tenía a todos los jóvenes de su edad detrás de ella. Adonis no se consideraba guapo y creía que jamás iba a conseguir que Alida se fijase en él, ya que había muchos más chichos que también querían estar con ella. Un día, el padre de Alida se fue a cazar a la montaña que estaba al lado del pueblo, dónde se decía que vivía un gigante. Pasaron las horas, y el padre no volvía. Alida, se asustó mucho y decidió ir a buscar a su padre, aún sabiendo que si se encontraba al gigante no tendría nada que hacer. Al enterarse, Adonis se fue a intentar evitar que Alida se metiese en la montaña, pero llegó tarde,  ya se había metido. Así, que reuniendo todo el coraje que tenía decidió meterse en la montaña para intentar salvar a Alida y a su padre. Cuando llevaba caminando aproximadamente dos horas, escuchó a Alida gritar. Sobresaltado, se dirigió al lugar del que procedía el grito, y al llegar, lo que vio le dejó paralizado: Un gigante de unos cuatro metro de alto había cogido a Alida y se la llevaba a dentro de una cueva. Adonis decidió esperar a que se hiciese de noche para intentar rescatarlos. Cuando oscureció, Adonis se metió sigilosamente en la cueva, y al comprobar que el gigante estaba dormido, liberó a Alida y a su padre, que estaban fuertemente atados con cuerdas. Pero justo cuando estaban a punto de salir, el padre golpeó con un pie una roca, y el sonido de ésta al golpear en la pared, retumbó por toda la cueva. El gigante, sobresaltado, se despertó y al ver que sus prisioneros se escapaban, se abalanzó contra ellos. Adonis se puso con los brazos abiertos delante de la cueva para intentar retener lo máximo posible al gigante para que Alida y su padre pudieran escapar. Como sabía que en cuanto el gigante se abalanzase sobre él, el no iba a poder ganar más tiempo, suplicó a los dioses que le transformaran en piedra para que el gigante no pudiera atrapar a Alida y a su padre. Al principio no pasó nada, pero al cabo de unos segundos, el cuerpo de Adonis se empezó a ensanchar, y éste comenzó a estar más rígido, de tal manera, que al cabo de 10 segundos, se transformó en una roca que bloqueaba completamente la salida. Al ver esto, Alida se enamoró completamente de Adonis, y cada día iba a dejar flores enfrente de la roca. Alida jamás se casó con nadie, ya que sólo quería a Adonis.

¿He mejorado durante el curso?


-          Comprensión de texto:

Este apartado, yo creo que es uno de los que mejor se me da. En el colegio que he estado desde 1º de la ESO, siempre han considerado muy importante comprender lo que se lee. Es por esta razón, por la que siempre nos mandaban bastantes libros que leer, textos que “analizar” (en cada curso añadíamos nuevas cosas que analizar) y es por esta razón por lo que creo que en este apartado no tengo muchos problemas. Sí que es cierto que muchas veces me precipito (por ejemplo en exámenes, que a veces leo sólo el principio y creo que ya se la respuesta, así que respondo rápido, y muchas veces me equivoco por no leerla entera), pero considero que ese no es un problema de comprensión de texto, sino de precipitarse, ya que si leo todo el texto, seguramente lo comprenderé. Un ejemplo que hicimos en clase fue el de “sucedió en una farmacia”, que era un texto que podía ser interpretado de distintas maneras, ya que no te da los suficientes datos como para que estés seguro de cuantos personajes hay en el texto, y quiénes son esos personajes por eso mismo para cada persona era una historia diferente.  
Así que considero, que en este apartado, no he mejorado demasiado, pero yo creo que ya lo tenía bastante avanzado.

-          Comprensión auditiva:

En este apartado, no iba tan bien como en el anterior. En especial lo demostré cuando hicimos el dictado de figuras. Quizás este sea uno de los apartados que peor se me dé. Cuando salió el primer día Miriam a dictarnos, a mi me costó mucho entender correctamente lo que ella quería decir (en muchos casos tenía que mirar lo que ponían mis compañeros para ver que habían puesto ellos porque estaba completamente perdido), pero al final, conseguí hacer el dibujo medianamente bien, aunque fuese con ayuda. El segundo día que hicimos este ejercicio, en el que salieron varios compañeros a dictar, me salió bastante mejor. No me hizo falta fijarme en lo que mis compañeros habían puesto, sino que sólo me guié por lo que entendía. Y el dicado me salió bien. Por eso creo, que en este apartado, mi nivel no era tan elevado cómo en el anterior cuando llegué a La Salle, pero lo he mejorado más que el anterior. Aún así no he llegado a dominarlo, y creo que tendría que haber hecho por mi cuenta algunas actividades más de este estilo para poder haber llegado a tener más nivel, ya que dos o tres me parecen insuficientes para que mejorase bastante.

-          Cómo escribo:

Este es un apartado, que en mi opinión también se me da bastante bien, ya que al haber trabajo tanto en mi antiguo colegio sobre textos y haberlos analizado, también mejoré bastante en este aspecto. Para mí, este apartado es el más importante, ya que todos los exámenes que hagamos son escritos, y todavía más importante, hay que escribir sin faltas ya que sino, los alumnos van a aprender mal. Por eso en mi antiguo colegio insistieron mucho, y se lo agradezco, ya que gracias a eso conseguí que no me bajaran ningún punto en selectividad, que es una cosa bastante frecuente. Pero además creo que no he avanzado en este apartado, ya que tampoco hemos escrito mucho (lo poco que he escrito ha sido en el blog), y yo suelo escribir bastante a menudo, por eso considero que con sólo escribir unos cuantas cosas en el blog, no voy a mejorar. Pero como es un apartado que practico bastante, no me preocupa demasiado.


-          Expresión oral

La expresión oral es algo con lo que tenía bastantes problemas. Cuando estoy hablando con amigos, siento que me expreso bien (si es cierto que muchas veces hablo muy rápido), pero cuando me ponía delante de un grupo de gente a hablar, la cosa cambiaba. No estaba acostumbrado a salir delante de un grupo a hablar. Por eso, al hacer la presentación, aunque no se me notó, me puse bastante nervioso, en especial antes de salir. Pero ya, las siguientes veces, no me puse tan nervioso, así que comprobé que era una cosa de acostumbrarse. Yo pensé que no me iba a poner tan nervioso, porque ya tengo práctica del violonchelo, pero comprobé que es una cosa muy distinta, ya que al hablar delante del público dependo de mi respiración, y no estaba acostumbrado a eso en el violonchelo, y me costó mucho. Gracias a que he tenido que salir bastantes veces durante este curso a hablar delante de la clase, he mejorado mucho, hasta el nivel de no ponerme nervioso si se me bien lo que tengo que hablar. Por eso mismo, considero este apartado como el que mejor he avanzado. Debo decir, que quizás esto fue un fallo de mi antiguo colegio, ya que la única vez que salí a hablar delante de la clase fue una vez en la que tuve que salir a recitar un poema (la canción del pirata), y aunque me la sabía, en algunas partes me ponía tan nervioso que me quedaba bloqueado. Por eso, estoy muy orgulloso con mi progreso en este apartado, y creo que he progresado bastante más de lo que me pensaba.   

jueves, 20 de enero de 2011

¿Qué es para mí la escuela?

Para mí, la escuela no es solo un armario. En mi opinión, la escuela es la que modula nuestra personalidad y nuestra forma de ser. Somos quienes somos gracias a la escuela, a los compañeros que hayamos tenido en esta y a los profesores que nos hayan enseñado. La escuela es la que nos crea una serie de valores, y la que nos enseña qué está bien y qué está mal. Es cierto, que la escuela en muchos casos aburre (ya sea porque alguna asignatura no te guste, o porque los alumnos sean demasiado pequeños y el método de enseñanza no sea divertido), pero aunque cuando eres pequeño no entiendes porque tienes que pasar tanto tiempo haciendo exámenes y estudiando cuando lo que quieres es jugar, cuando te vuelves más mayor lo agradeces. Por eso mismo, para mí la verdadera esencia de la escuela, de este “armario”, es que te crea como persona. Para mí, la cuestión no es si es divertida o no, sino si es útil, y si nos aporta algo en la vida, y más que aportarnos una pequeña cosa, nos aporta la vida en sí, nos garantiza un buen futuro.

domingo, 16 de enero de 2011

The potter

Desde que vi el video, tengo claro con quien identifico a la tortuga. En mi vida, ha habido muchas personas que han sido muy importantes para mí, pero la que más lo ha hecho ha sido mi profesora de violonchelo. Desde el primer día que me hizo la prueba para ver si tenía cualidades para tocar ese instrumento o no, mi profesora y yo siempre hemos estado muy unidos.  Y como vio que tenía claro que quiero dedicarme al violonchelo ya desde que tenía siete años, decidió dedicarme todo el tiempo que tenía y a enseñarme todo lo que sabía. Lo bueno de ir a una escuela de música, es que cómo la mayoría de la gente va porque sus padres les obligan, no hay muchos alumnos que se lo tomen enserio. Y por eso, mi profesora se vuelca siempre con alumnos que están interesados y que tienen cualidades. Por eso, para mí, no ha sido solo una profesora de chelo, sino que también ha sido casi como una madre. Ya desde los 10 años, daba clase más tiempo que la mayoría de la gente. Y a los 12, empecé a ir a su casa, para todavía dar más clases, lo que me hizo unirme todavía más a ella. Ella en su clase no solo te enseña violonchelo, sino también unos valores que me han sido muy importantes en mi vida. Ella ha influido mucho en mi educación, casi tanto como mis padres. Y otra cosa que me hizo pensar en ella nada más ver el vídeo, fue ver cómo el niño quiere aprender a hacer todo de golpe pero la tortuga no le deja y le obliga a ir avanzando poco a poco. Al principio a mi me pasaba lo mismo. Yo quería empezar a tocar lo que me gustaba aunque fuese difícil, quería ir cambiando de posiciones muy rápido cuando aún no controlaba la básica, pero ella no me dejó, y aunque a veces creía que no progresaba, cuando fui creciendo me di cuenta de la importancia que tenía que fuese a su ritmo. Por eso tiene una frase que la caracteriza: “no me importa si haces mucho o poco, lo que quiero es que lo que hagas lo hagas bien”. Y aunque antes me frustraba, ahora le agradezco todo el esfuerzo y todo lo que ha hecho por mí. Y es por estas razones por las que no pensé en otra persona más que en ella para identificarla con la tortuga.

Carta a los reyes magos


-          Queridos reyes magos:
Durante estos dos últimos años me he portado muy bien, pero el año pasado, aún después de mi buen comportamiento, no me trajisteis lo que pedí. Quiero creer que fue porque no recibisteis mi carta. En mi lista del año pasado, figuraban los siguientes regalos: Un i-pod touch, unos patines, una televisión de 40 pulgadas y unas botas de fútbol. Pero cuando me levanté por la mañana, lo único que me encontré fue 1 jersey azul, 1 gorro de lana y una mochila para el colegio. Así que este año no voy a hacer lista, ya que como no recibí ninguna de las cosas que pedí el año pasado, quiero lo mismo. A ver si esta vez me traéis lo que pedí, sino, no me portaré tan bien, ya que haga lo que haga obtendré los mismos regalos.
Atentamente,
Nacho Atienza

sábado, 15 de enero de 2011

Instrucciones para atarse los cordones

Hay distintas maneras de atarse los cordones, pero me centraré en la manera más común. Atarse los cordones no es una tarea fácil la primera vez que se intenta. Lo primero que hay que hacer, es coger con la mano derecha el cordón derecho y con la mano izquierda el cordón izquierdo y estirarlos. Una vez estirados, se cruzan los cordones y se cambian de mano, de tal manera que la mano derecha coja ahora el cordón izquierdo y la mano izquierda el cordón derecho, y al hacer esto, los cordones formarán una X. Después, el cordón izquierdo (cogido por la mano derecha) se pasa por debajo del cordón derecho (cogido por la mano izquierda) por la parte inferior de la cruz, y luego, se tira de los cordones hacia los lados, de tal manera que la cruz se vaya reduciendo de poco a poco hasta que desaparezca, y los cordones queden en forma de V. Lo siguiente, consiste en coger con la mano derecha el cordón izquierdo (ahora situado a la derecha) y estirarlo hacia arriba. A continuación, se pone el dedo índice de la mano izquierda en la mitad del cordón, y con la mano derecha, con la parte superior del cordón, se pasa por el otro dedo, de tal manera que quede en forma de lazo. Ahora el cordón izquierdo (cogido con la mano izquierda) se pasa por delante del lazo y luego, se pasa este cordón por el hueco que ha quedado entre el lazo y los dos cordones cruzados de antes, cuando estaban en forma de X, y se estira de tal manera que quede también en forma de lazo, y luego se aprieta. Finalmente, se repite el mismo proceso de la X (pero ahora en vez de con cordones, con los lazos) y, ¡ya has conseguido atarte los cordones! Si se consigue, hay que estar orgulloso, ya que no todas las personas son capaces de realizar esta hazaña.